Ley General de Protección de Datos: ¿está preparada tu empresa?
La Ley General de Protección de Datos (LGPD) entró en vigor en Brasil el 18 de septiembre de 2020. Inspirada en el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) europeo, esta legislación fue creada para proteger la privacidad de los datos de los usuarios.
Aunque las sanciones por el incumplimiento de la ley se establecieron para aplicarse a partir del 1 de agosto de 2021, es fundamental que empresas de cualquier tamaño y sector que recolecten o manejen datos de clientes cumplan con una serie de normas y reglas para evitar violar la legislación.
Entender los fundamentos principales de la LGPD es el primer paso para comprender cómo tu empresa debe prepararse para esta nueva realidad.
LGPD: ¿qué es y cómo funciona?
La LGPD (Ley Nº 13.709 de agosto de 2018) regula cómo los datos de los brasileños deben ser recolectados, tratados, almacenados y protegidos. Si quienes manejan los datos incumplen la legislación, hay sanciones previstas, ya sea por filtraciones de datos o por otras irregularidades.
La ley consta de diez principios basados en el consentimiento de cada ciudadano sobre sus datos personales. Las empresas que recolecten datos deben informar la finalidad de uso, cómo serán manejados y por qué se necesita esa información. En cualquier momento, el consumidor (propietario de los datos) puede solicitar la eliminación de sus datos de una base de datos.
Además, la legislación enfatiza la transparencia en el uso de la información. Quien gestiona la base de datos es responsable de su administración, y en caso de una filtración de datos, la Autoridad Nacional de Protección de Datos (ANPD) y los usuarios deben ser notificados inmediatamente.
Almacenamiento, uso y eliminación de datos
La transparencia no es el único pilar fundamental de la LGPD. La legislación establece claramente que quienes almacenan y utilizan datos de terceros, independientemente de su propósito, son responsables de ellos, incluso cuando el propietario de la información solicite su eliminación.
En otras palabras, el titular de los datos puede, en cualquier momento:
• Solicitar acceso a los datos almacenados.
• Pedir la corrección de datos incompletos o desactualizados.
• Revocar el consentimiento de uso.
• Solicitar la eliminación total o parcial de los datos tratados.
En resumen, las empresas deben adaptarse a esta nueva realidad en todas las etapas del proceso. Desde la recopilación (siempre con el consentimiento del titular), pasando por el uso (informando de manera transparente sus fines), hasta la seguridad y eliminación de los datos, todo debe cumplir con la normativa. Es en este contexto que cobran relevancia los equipos y servicios de Destrucción Segura de Datos (DSD).
Destrucción Segura de Datos: ¿qué es y cómo funciona?
Simplemente borrar o eliminar datos de una base no garantiza que no puedan ser recuperados. En manos de personas malintencionadas, una filtración de datos o el acceso a contenido sensible puede causar graves problemas a tu empresa. Recuerda: la responsabilidad siempre recae en quien almacena los datos.
Por esta razón, recurrir a empresas especializadas en Destrucción Segura de Datos es la forma más segura y garantizada de evitar que fallos en los sistemas o datos eliminados de manera superficial sean interceptados.
Las soluciones de DSD están disponibles de diversas maneras: puedes adquirir equipos para la destrucción de datos, alquilarlos según la demanda, o contratar a una empresa especializada para que realice este servicio periódicamente. Todo dependerá de tus necesidades y de los profesionales disponibles en tu empresa.
CBL Soluciones es representante exclusivo en Brasil de tres de las mayores empresas estadounidenses de Destrucción y Desmagnetización de Datos. Somos la única empresa homologada y autorizada por el fabricante para vender con garantía y realizar mantenimiento de los equipos de las marcas Garner Products, Proton Data Security y SEM, proveedor de equipos para el gobierno estadounidense.
También ofrecemos servicios de destrucción de datos, que pueden realizarse en la sede del cliente o en una de nuestras unidades, así como la opción de alquilar equipos para que las empresas lleven a cabo este servicio con personal propio.